► Despertar Nº3 (2006)

Observo desde el mundo la sombra de las almas, la noche de los cuerpos, la humanidad arrasada…Espíritus dormidos que sueñan con la vida, trocando mustios barrotes de un cristianismo obsoleto, por promesas de una era de pulidos enrejados; curando dogma con dogma, reglas con más reglas; jueces eternos en eternos tribunales; castigos ilusorios; estúpidas condenas…

El camino de aquel que cuestiona es sendero sin castigo; ruta virgen sin señales que conduce hasta uno mismo; donde el juicio que condena es solo juicio de valores; descartando las certezas que se tornan espejismos, indagando casi a ciegas, buscando nuevos colores…

Transiciones peligrosas que requieren osadía; decisiones sin respaldo de la historia conocida; abandonando estructuras por la ansiada libertad; renunciando a lo seguro sin poder argumentar…

Soy arroyo de montaña para el que me ha de cruzar; sereno espejo en el agua para quien sabe observar, y aunque danzo por la vida como puro manantial, soy mar embravecido para aquel que busca el mal…

Mi camino no es camino que otro habrá de transitar; no he de dar explicaciones a quien no quiera escuchar; cuando vemos que en milenios la humanidad no ha cambiado ¿Por qué insistir con aquello que sólo nos ha estancado?

Generaciones engañadas desde el principio del tiempo, combinando lo de siempre, esperando surja algo nuevo; Terroristas, dicen unos; Opresores, claman otros; revoluciones basadas en modelos inculcados, resistir y perpetuar, viejo dogma exornado.

Hoy, que el fututo viste de harapos, ha de nacer un canto sin culpa ni condena; aunque los seres humanos forjen sus propias cadenas, de la aleación etérea vertida de sus creencias; aunque no gane intereses el que trabaja la tierra, sino el que aguarda sentado detrás de unas monedas; aunque hoy debas andar solo, sin ser pastor ni rebaño, porque amigos y hermanos se sienten amenazados; aunque oigamos las promesas de otro futuro mejor, mientras nos van enseñando…a venerar el dolor…